Uno de los sitios llamativos de las faldas del Imbabura es el Corazón del Imbabura, que es una formación natural producto de un deslizamiento de uno de sus flancos y que curiosamente le ha dado la forma de un corazón. En su interior se ha creado microclimas que a su vez ha permitido que se desarrollen una vegetación propia de los ecosistemas de montaña en la que se ve un predominio de árboles de pumamaki (oreopanax ecuadorensis). De igual forma existe una variedad interesante de aves de montaña, mamíferos pequeños, insectos y reptiles.
El Corazón del Imbabura es un lugar único debido a su forma, a los mitos que se cuentan, a su biodiversidad y sobre todo a la vista impresionante del lago San Pablo (Imbakucha). Junto a este se hallan otros sitios de interés como los árboles de lechero Tupatán y Kingu Cruz, árboles considerados sagrados dentro de la cosmovisión andina.